Crimen en Piñero: la historia del preso apuñalado que se vinculó con el narcotráfico

Agustín de la Encina, el joven de 26 años que murió este lunes tras ser atacado a puñaladas en la cárcel de Piñero, había sido trasladado a ese penal hacía pocos meses. Previamente, estaba detenido en la cárcel de Coronda, donde su vínculo con el narcotráfico se intensificó. Originalmente, su detención se había dado en 2021, cuando lo encontraron comercializando drogas en el centro de Rosario, lo que lo llevó a enfrentar una causa federal. Sin embargo, el tiempo tras las rejas significó para él el inicio de nuevas investigaciones en su contra, que incluyeron instigación de un intento de asesinato y su participación en el transporte de 30 kilos de cocaína.

Antes de que su vida se viera envuelta en el narcotráfico, Agustín llevaba un perfil laboral variado. En su cuenta de LinkedIn se presentaba como broker de seguros, y su experiencia abarcaba desde la reparación de sistemas operativos hasta labores administrativas en una escuela de conducción. También tuvo un breve paso como columnista radial en un programa de FM. Sin embargo, hacia 2021 ya se había consolidado como un hábil vendedor de drogas en el microcentro rosarino, alejado de las violentas dinámicas de los barrios periféricos de la ciudad. Su detención ocurrió tras un operativo federal que lo encontró en posesión de 700 gramos de cocaína en un departamento céntrico.

El traslado a Piñero fue una constante en su estadía en prisión. Desde su ingreso en la Alcaidía de Rosario en 2022, pasó por diferentes establecimientos penitenciarios, alternando entre Coronda y Piñero, lugares en los que sus problemas con la Justicia solo se multiplicaron. En marzo de 2023, se lo vinculó con un intento de homicidio contra una mujer que le había prestado 3800 dólares para adquirir cocaína. Agustín no devolvió el dinero y, al parecer, contrató a sicarios para eliminarla. La mujer sobrevivió al ataque, aunque quedó parapléjica, y su testimonio fue clave para imputarlo por homicidio en grado de tentativa.

Otro episodio que marcó su estadía en prisión fue su implicancia en el secuestro de un cargamento de cocaína valuado en 250 mil dólares. La investigación comenzó en 2023, cuando un taxista sospechó de dos pasajeros que trasladaban 10 kilos de cocaína en Rosario. Ese hallazgo desencadenó una serie de operativos que concluyeron en julio de 2024 con el hallazgo de 32 kilos de la droga en una estación de servicios de San Pedro. Desde la cárcel, Agustín habría participado en la logística del transporte, coordinando acciones con personas involucradas. Los investigadores señalaron que mantenía frecuentes contactos telefónicos con Yanina Alvarado, hermana del jefe narco Esteban Alvarado, condenada por tráfico de drogas.

El crimen que terminó con la vida de Agustín de la Encina ocurrió dentro del penal de Piñero, donde estaba alojado en un pabellón para presos de alto perfil desde mayo de 2024. Según las primeras versiones, fue atacado durante una riña con otros reclusos, aunque no se ha precisado quiénes participaron en el hecho ni las circunstancias exactas. Cerca de las 18:30, un móvil de emergencia trasladó al joven al Hospital Clemente Álvarez, donde finalmente falleció a causa de múltiples heridas de arma blanca.

La fiscal de Homicidios Dolosos, María de los Ángeles Granato, está a cargo de la investigación. Ordenó el secuestro de teléfonos celulares de otros reclusos en busca de pruebas que permitan esclarecer los motivos del ataque y identificar a los responsables. La muerte de Agustín deja abiertas interrogantes sobre las condiciones de su custodia y el control del narcotráfico detrás de los muros de las cárceles santafesinas.

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