Multitudinaria marcha en Rosario y el país contra las políticas de Milei: “Al clóset no volvemos nunca más”
Más de cien localidades, incluyendo Rosario, se sumaron a la “Marcha Federal del Orgullo Antifascista y Antirracista”. En Buenos Aires, la movilización fue del Congreso a Plaza de Mayo.

Las calles de Argentina volvieron a llenarse este sábado con la Marcha Federal del Orgullo Antifascista y Antirracista, una masiva manifestación en rechazo a las declaraciones del presidente Javier Milei en Davos. Allí, el mandatario había apuntado contra las minorías sexuales y la llamada “agenda woke”, además de expresar su intención de derogar el femicidio como agravante penal, el documento no binario y el cupo laboral trans.
Bajo el lema “La vida está en riesgo ¡Basta! Al clóset no volvemos nunca más”, más de cien localidades del país y varias ciudades del mundo se sumaron al repudio. En Buenos Aires, la marcha tuvo su epicentro en el Congreso de la Nación y avanzó hasta Plaza de Mayo. En Rosario, la concentración comenzó a las 17 en la plaza San Martín y se dirigió hacia el Monumento a la Bandera con consignas contra el “odio y fascismo”.

La convocatoria, que surgió de asambleas de organizaciones de derechos humanos, rápidamente sumó adhesiones de sectores sindicales, como la CTA, ATE, CTERA y la CGT, así como de distintos partidos políticos, desde el justicialismo y el socialismo hasta la UCR y la izquierda. En la previa, la diversidad de espacios convocantes generó impacto en redes sociales: “La UCR, La Cámpora, la Coalición Cívica y el FIT van a estar este sábado en la misma marcha. ¿Imposible? Es el glorioso movimiento LGBT argentino uniendo al país contra la homofobia y el odio fascista de Milei”, expresaron militantes en X.
El mensaje del presidente traspasó fronteras y también hubo manifestaciones en al menos 20 ciudades del mundo, con protestas en embajadas argentinas en países como Chile, Uruguay, Brasil, México, España, Italia, Francia, Reino Unido y Alemania.La postura del oficialismoDesde La Libertad Avanza (LLA) minimizaron la marcha y la calificaron como “política”. El vocero presidencial, Manuel Adorni, intentó matizar las declaraciones de Milei asegurando que “no se cuestiona el feminismo como defensa de la mujer, sino que detrás de él haya un negocio para unos pocos”. En redes, dirigentes y cuentas afines al gobierno criticaron la convocatoria y apuntaron contra referentes de la oposición.

Mientras tanto, en un intento por contrarrestar la multitudinaria manifestación, la secretaria general de la Presidencia, Karina Milei, encabezó un “festival de afiliaciones” en la Ciudad de Buenos Aires, promoviendo la inscripción de nuevos militantes en LLA. La iniciativa se replicó en distintas provincias como muestra de apoyo al oficialismo en un contexto de creciente movilización social.
