Transformaron un terreno vacío en un espacio para los chicos, pero denuncian trabas y amenazas en barrio Piamonte

Vecinos y profesores denuncian trabas para continuar las prácticas de fútbol en un terreno municipal que recuperaron hace más de diez años. Aseguran que el lugar, que era un baldío cubierto de malezas, se transformó en un espacio de contención para los chicos del barrio.

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Un grupo de jóvenes, vecinos y profesores llevan adelante en barrio Piamonte desde hace más de una década un proyecto deportivo y social en un terreno municipal, que ellos mismos limpiaron y acondicionaron para convertirlo en un espacio deportivo comunitario. Allí, cada semana, decenas de chicos practican fútbol bajo la guía del profesor Marcelo, quien colabora de manera voluntaria.

Sin embargo, en los últimos días, los vecinos aseguran que enfrentan obstáculos para continuar utilizando el predio, luego de que un hombre que se presenta como “presidente del barrio” los denunciara ante las autoridades municipales por una supuesta usurpación.

“Nosotros no nos adueñamos de nada. Este es un lugar público, para todos los chicos del barrio. Solo quisimos ampliar la cancha, correr un arco y armar una cancha de once, para que más chicos puedan practicar y alejarlos de la calle”, contó Mauro, uno de los impulsores del proyecto, en diálogo con rosarioinfo.com.

Según relató, el conflicto comenzó cuando este hombre se acercó “de forma prepotente” mientras estaban trabajando con una máquina retroexcavadora que habían alquilado con el dinero recaudado en rifas y ventas de comida. “Vinieron la policía y agentes municipales, incautaron la máquina y hasta labraron un acta contra uno de los chicos. Todo por una denuncia falsa”, lamentó.

El grupo afirma que el espacio había sido consultado para su utilización a la Municipalidad de Rosario, y que su único objetivo es brindar una oportunidad a los jóvenes del barrio, muchos de los cuales encontraron en el deporte una manera de salir de contextos difíciles. “Anoche mismo vino un chico de 16 años, con problemas de adicciones, a pedirnos si podía sumarse a entrenar. Eso es lo que queremos: que este lugar sirva para recuperar a los pibes”, explicó otro de los vecinos.

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El profesor, quien colabora sin cobrar un peso, destacó fuera de cámara que el proyecto busca dar un entrenamiento de calidad: “Acá los chicos trabajan con disciplina, como en cualquier club. Algunos ya tuvieron la posibilidad de viajar y mostrarse afuera. Esto lo hacemos a pulmón, con nuestros propios recursos, porque creemos que el deporte puede cambiarles la vida”.

Desde el grupo también remarcan que el conflicto con el espacio deportivo no es el único problema que afecta a barrio Piamonte. Vecinos de la zona denuncian desde hace tiempo la falta de iluminación, calles en mal estado y hechos de inseguridad, especialmente en el descampado lindero al arroyo Saladillo. “Este sector estuvo abandonado durante años. Acá hubo muertes, balaceras, robos. Por eso quisimos transformar el lugar en algo positivo”, señalaron.

“Nos duele que por una mentira nos frenen algo que hacemos de corazón. No pedimos plata, no buscamos política ni beneficio personal. Solo queremos que los chicos tengan un lugar seguro donde crecer”, concluyó Mauro.

Rosario Info

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