Cuatro años después, la búsqueda de justicia por el asesinato de Fernando Báez Sosa continúa

 Hoy se cumplen cuatro años desde que Fernando Báez Sosa fue brutalmente asesinado a golpes a la salida de un boliche en Villa Gesell. Su madre, Graciela Sosa, expresó que el tiempo se detuvo para ella y su esposo en el momento en que mataron a su único hijo, a quien extraña "terriblemente". La familia espera que el Tribunal de Casación Penal bonaerense resuelva las apelaciones de las condenas a prisión perpetua de cinco de los involucrados y de otros tres que recibieron 15 años de cárcel.

Graciela Sosa y su esposo, Silvino Báez, convocaron a una concentración y misa interreligiosa en las escalinatas de la Facultad de Derecho de la Universidad de Buenos Aires (UBA) en Recoleta, para conmemorar el trágico aniversario. "Seguimos igual, hasta peor. Nunca pensé que con el correr del tiempo iría empeorando. Me siento bajoneada, pasaron las fiestas de Navidad y Año Nuevo, que fueron muy difíciles para nosotros", compartió Graciela en una entrevista con Télam.


Los padres de Fernando esperan un fallo favorable de la Sala 2 del Tribunal de Casación Penal bonaerense, que debe resolver las apelaciones presentadas por los abogados y la fiscalía. La familia busca que los ocho involucrados reciban la pena de prisión perpetua como coautores del "homicidio doblemente agravado por el concurso premeditado por dos o más personas y por alevosía en concurso ideal de lesiones leves".

Silvino Báez, padre de Fernando, señaló que hay "rumores" sobre una posible rebaja en las sentencias, pero expresó que no tiene miedo ante el fallo de Casación. "Una vez que uno cumple 18 años, uno tiene que hacerse cargo de sus actos. Deben hacerse responsables del asesinato de mi hijo", afirmó.


La situación emocional de la familia es complicada, y Silvino expresó su indignación por los privilegios que, según él, tienen los condenados en la cárcel. "Necesitamos justicia ejemplar para que podamos seguir con más tranquilidad. Los asesinos de mi hijo tienen muchos privilegios en la cárcel, no debería ser así, tendría que ser como cualquier hijo de vecino", añadió.

La misa interreligiosa en la Facultad de Derecho recordará a Fernando y destacará aspectos de su vida. Aunque han pasado cuatro años desde aquel fatídico día, la familia Báez Sosa sigue en busca de justicia para su hijo.

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